Malvinas fuera del acuerdo del Brexit: Así se va a encarecer la merluza y el calamar que pesca la flota española

Malvinas fuera del acuerdo del Brexit: Así se va a encarecer la merluza y el calamar que pesca la flota española

El pirata Francis Drake saqueó la ría de Vigo y quemó la iglesia de Bouzas en 1589. Dos siglos y seis lustros después, el brexit británico golpea a 175 barcos de la flota de Vigo que faenan en aguas del Reino Unido y Malvinas y saqueará de forma directa e indirecta los bolsillos de empresarios y consumidores. Será el resultado de la imposición de aranceles por pescar en Malvinas y por el recorte de cuotas en Gran Sol.

«Lo van a sufrir las empresas y el consumidor», se lamenta Javier Touza, presidente de la Cooperativa de Armadores y de la Asociación de Empresas Mixtas (Acemix).

A consecuencia de la salida del Reno Unido de la Unión Europea, los territorios de ultramar que tiene autonomía pero están bajo la corona británica son considerados países terceros y su comercio está sujeto a aranceles. Ese el caso de Malvinas que vive fundamentalmente de la pesca.

A partir de ahora el calamar de Malvinas tendrá que pagar un arancel del 6 % y la merluza un 15 % y esto se notará en el precio de venta en lonja y al consumidor final. Además de «los mayores costes habrá más burocracia, por las certificaciones de origen lo que provocará demoras y más tiempo en la cadena hasta llegar a los hogares y la hostelería. «Somos los principales proveedores de calamar del mercado europeo», precisa Javier Touza sobre la repercusión que puede tener un aumento del precio del producto.

En Malvinas pescan 18 barcos arrastreros con bandera de las islas. Además hay faenando otros 25 buques con bandera española y con sede en Vigo. Esta flota da empleo directo en la ría de Vigo y Marín a 400 patrones, jefes de máquinas y personal cualificado en los buques congeladores

En los caladeros más cercanos a la costa se pesca el calamar pequeño y en el límite de las 150 millas se capturan preferentemente merluza, rosada y pota. La flota de Vigo captura cada año en Malvinas 80.000 toneladas de calamar y otras tantas de merluza y pescados diversos. Al imponerse los aranceles de hasta el 18 % se van a perder al menos unos 70 millones de euros, según estimaciones de Hugo González, gerente adjunto de la Cooperativa de Armadores.. A los gravámenes por importar el pescado se suma el encarecimiento de las licencias en los últimos años. «El precio de la licencia por pescar calamar ha subido un 50 % en el año 2020», pone de relieve Javier Touza.

La situación en Gran Sol, el caladero situado entre Irlanda y Gran Bretaña, tampoco es buena según pone de relieve el gerente adjunto de la cooperativa de armadores Hugo González que dice que «hemos salido trasquilados por la presión del Reino Unido sobre la Unión Europea».

Las cuotas de pesca en el Gran Sol, caladero tradicional de la flota viguesa y de todo el norte de España se han reducido este año en 1.400 toneladas. Esto significa que de entrada se han perdido 7 millones de euros de ingresos por posibles capturas.

En Gran Sol se encuentran faenando 88 barcos españoles con una media de 25 tripulantes cada uno. De estos la mitad de los buques son gallegos y de ellos hay 12 con base en el puerto de Vigo, los restantes se ubican en A Coruña, Celeiro, Burela

«Es un día triste para la pesca, las consecuencias del brexit son imprevisibles», dice el presidente de la Cooperativa de Armadores y de la Asociación de Empresas Mixtas de Pesca. Touza señala que hay 175 barcos afectados y que las cosas todavía no están claras del todo porque no se ha establecido aún el cupo de pesca para el año 2021 en aguas británicas.

De momento a los barcos permite durante tres meses un 25 % de cuota provisional sobre es un porcentaje sobre el que tenían en el año 2020. Dentro de tres meses Touza espera que haya otra reunión porque falta ratificar en el Parlamento europeo y en el inglés todas las cuestiones pendientes. Un viaje de 10.500 kilómetros en 25 días para faenar durante dos meses en las Malvinas

Los buques están pertrechando para partir a Malvinas a primeros de enero. Es el caso del Igueldo, de la empresa Marfrío, que ayer cargaba cajas de leche y otros alimentos para la larga singladura de 25 días que les llevará hasta las aguas de la colonia británica. «No sabemos la fecha exacta en que vamos a zarpar pero será después de Reyes y puede demorarse hasta mediados de mes», señala el inspector de pesca de este gran congelador.

La campaña de pesca en Malvinas comienza en febrero pero los barcos tardan 25 días de singladura en cubrir los 10.500 kilómetros de distancia que los separan del puerto de Vigo. Antes de lanzar los aparejos tiene que comprobar que todo está bien y luego acometer la campaña que dura 60 días, hasta finales de abril. Después se toman un descanso y en verano trabajan otra marea durante los meses de agosto y septiembre y en octubre vuelven a Vigo para llevar a cabo reparaciones y mantenimiento.

Este año se ha producido un aumento de costes de explotación debido a las dificultades para el traslado de las tripulaciones. La pandemia ha provocado que no se pudiese desembarcar durante meses en el puerto de Montevideo. Es uno de los que se habitualmente se utilizan para dejar a los marineros que proceden de países sudamericanos y de terceros países como Indonesia y donde también se llevan a cabo a cabo descargas de pescado para transportarlo luego en mercantes hasta Vigo. Por eso muchos tripulante tuvieron que ser desembarcados en Vigo y luego repatriados en avión a sus países de origen. (Luis Carlos Llera – LA VOZ DE GALICIA) #NUESTROMAR

Compartir nota en redes...

Subscribe
Notify of
guest
0 Comments
Inline Feedbacks
View all comments
Scroll al inicio